La leche frita es uno de los postres más tradicionales de la gastronomía española, especialmente popular en la región de Castilla. Originalmente elaborada con una mezcla de leche, harina y azúcar, esta receta se caracteriza por su cremosidad interior y su capa exterior crujiente. En esta versión innovadora, le damos un giro delicioso al incorporar un relleno de Nutella y almendras tostadas, creando una combinación irresistible entre el dulce de la crema de cacao y la textura crujiente de las almendras. Este postre se convierte en una experiencia única que fusiona la tradición con un toque moderno y gourmet.
Ingredientes (para 12 piezas):
Para la crema de leche:
- 500 ml de leche entera
- 50 g de azúcar
- 50 g de harina de maíz (maicena)
- 1 huevo
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 rama de canela (opcional)
- La cáscara de un limón (opcional)
Para el relleno:
- 100 g de Nutella (o crema de avellanas con cacao)
- 50 g de almendras tostadas, picadas gruesas
Para el empanado:
- 2 huevos batidos
- 100 g de harina de trigo
- 100 g de pan rallado
- Aceite de girasol o de oliva suave para freír
Para decorar:
- Azúcar glass
- Canela en polvo (opcional)
Preparación de la crema de leche:
En una cacerola, calentar la leche junto con la rama de canela y la cáscara de limón, si se usa. Llevar a ebullición a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Una vez que la leche esté caliente, retirar del fuego y dejar infusionar durante unos 10 minutos para que tome los sabores de la canela y el limón. Colar la mezcla para eliminar las impurezas.
Mientras tanto, en un bol aparte, mezclar el azúcar y la harina de maíz. Batir el huevo en otro tazón y añadirlo a la mezcla de harina y azúcar, removiendo bien hasta que no queden grumos.
Verter lentamente la leche caliente sobre la mezcla de huevo y harina, batiendo constantemente para evitar que el huevo se cocine. Una vez todo bien integrado, volver a poner la mezcla en la cacerola y cocinar a fuego bajo, sin dejar de remover, hasta que espese y obtenga la consistencia de una crema. Este proceso suele tardar entre 5 y 10 minutos.
Cuando la crema haya alcanzado la textura deseada, retirarla del fuego y dejar enfriar. Es importante que la crema se enfríe por completo antes de continuar con el siguiente paso.
Rellenado de las piezas:
Una vez que la crema esté fría, tomar porciones con una cuchara y formar pequeñas porciones ovaladas o rectangulares, de aproximadamente 5 cm de largo. Luego, hacer un pequeño hueco en el centro de cada pieza con el dedo o con una cuchara pequeña.
Rellenar el hueco con una pequeña cantidad de Nutella y algunas almendras tostadas y picadas. Asegúrate de no llenar demasiado para que sea más fácil cerrar las piezas sin que el relleno se salga. Formar nuevamente la pieza de crema, envolviendo el relleno de manera que quede completamente sellada.
Empanado y fritura:
Colocar la harina, los huevos batidos y el pan rallado en tres platos separados. Pasar cada pieza de leche frita primero por la harina, cubriéndola bien por todos los lados. Luego, sumergirla en el huevo batido, asegurándose de que se empape completamente. Finalmente, pasarla por el pan rallado, presionando ligeramente para que el empanado se adhiera bien.
En una sartén grande, calentar suficiente aceite para freír a fuego medio-alto. Freír las piezas de leche frita en pequeñas tandas, no sobrecargando la sartén. Cocinar durante unos 2-3 minutos por cada lado o hasta que estén doradas y crujientes. Retirar y colocar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Decoración:
Una vez fritas y escurridas, espolvorear las piezas con azúcar glass y un poco de canela en polvo (si se desea). También se puede añadir más almendras picadas por encima para decorar y añadir un toque extra de sabor.
Sugerencias para acompañar:
Este postre puede servirse solo, pero también queda perfecto acompañado de una bola de helado de vainilla o de frutas rojas. Para un contraste de sabores, una salsa de frutas como frambuesas o fresas puede complementar maravillosamente la cremosidad del relleno de Nutella.
Variaciones:
- Si prefieres un sabor menos dulce, puedes usar crema de almendras en lugar de Nutella para un relleno más ligero.
- Para una versión sin gluten, sustituir el pan rallado por harina de arroz o harina sin gluten, y asegurarse de que la Nutella sea sin gluten.
- Puedes agregar un toque de licor, como licor de avellana o ron, a la crema para darle un sabor más profundo y adulto.
- Para un toque más frutal, en lugar de almendras, puedes añadir trozos de fruta deshidratada (como arándanos o pasas).
Conservación:
Si no se consumen inmediatamente, las piezas de leche frita pueden conservarse en el refrigerador durante 2 a 3 días. Para recalentarlas, se recomienda usar el horno o una freidora de aire para recuperar la textura crujiente. No se recomienda congelarlas, ya que la crema y el empanado pueden perder su consistencia al descongelarse.
Reflexión final:
La leche frita rellena de Nutella y almendras tostadas es una deliciosa reinvención de un postre clásico. El contraste entre la suavidad cremosa de la leche frita, el relleno de chocolate y la crocancia de las almendras crea una experiencia de sabor única, mientras que la fritura en aceite caliente añade una textura crujiente que equilibra perfectamente la suavidad de la crema. Este postre es ideal para ocasiones especiales o para disfrutar de un momento indulgente en cualquier momento del día, brindando una mezcla perfecta de tradición, innovación y sabor.